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Su camino apunta a una olimpiada

El fin de semana pasado en Cali, Colombia, Diego Arévalo, en los 2.000 metros obstáculos, y Valeria Cornejo, en los 1.500 metros planos, alcanzaron la medalla de oro en el Campeonato Sudamericano de Menores 2014, disputado en Cali, Colombia.

Ellos son las caras más visibles de la nueva camada de atletas locales que empieza a brillar a nivel internacional con resultados prometedores.
Ambos atletas locales destacan por su fuerza mental y sus condiciones innatas. Sus caminos están marcados por grandes victorias y sacrificios que tienen como meta una olimpiada.

¿Qué sensación les deja el triunfo en el sudamericano de Cali?

Arévalo: La competencia estuvo reñida, realmente tuvimos que esforzarnos hasta el último momento y por suerte lo planificado dio resultado. La clave estuvo en los últimos 400 metros, donde decidí arriesgar para ponerme en punta. En cada carrera aprendes y te sirve para la planificación a futuro. Fue una buena forma de cerrar el año.

Cornejo: Primero que siempre se debe pelear por el objetivo. Nos trazamos esa meta y lo logramos gracias al esfuerzo y la dedicación. Alegría y mucho compromiso porque la queríamos desde hace rato, desde que volví a las pistas hace unos siete meses. En este año logré un bronce sudamericano en el preolímpico y por eso esto fue una revancha.

¿Qué significa esta medalla en su carrera deportiva?

Arévalo: Toda medalla es gratificante, siempre será un honor conseguir una presea para el país. Significa mucho desde lo emocional y desde lo mental. Esta presea fue una buena forma de cerrar un excelente año donde se sumaron algunos eventos internacionales y sobre todo la presencia en las Olimpiadas Juveniles de Najing de donde vine con ganas de más porque no pude entrar entre los cinco mejores.

Cornejo: Con esta medalla estoy contenta y fortalecida para el futuro, ya que vuelvo a obtener un oro sudamericano luego de tres años. Tuve una etapa difícil donde me alejé de las pistas y extrañaba competir. Volver y al corto tiempo sumar un triunfo siempre cae bien. Ahora voy por más.

¿Qué tan sacrificado es alcanzar una medalla sudamericana?

Arévalo: Cuesta mucho, a veces la gente no se da cuenta de eso. Entrenas duro para conseguir esa meta y sabes que los demás entrenaron igual de duro. Debes estar concentrado al 100 por ciento y sacrificar mucho. En el momento de la carrera no hay vuelta atrás y debes dar todo, solo eso te garantiza un buen resultado.

Cornejo: Esta medalla sí costó mucho porque como dije volví a entrenar de nuevo y todo significaba doble sacrificio. Llegué a llorar y vomitar en los entrenamientos porque mi cuerpo ya se había olvidado del sacrificio. Toda medalla cuesta, siempre va a doler alcanzar la meta.

¿Qué le motiva a seguir dentro de las pistas?

Arévalo: Me gusta. Me siento feliz en cada carrera y disfruto de lo que hago. Nunca me siento abatido y trato de dar lo mejor, a veces sale y otras no; pero siempre lo vuelvo a intentar. Desde que  me inicié en esto, hace cinco años, no concibo mi vida sin correr. Además está el apoyo de mi familia y de mis entrenadores, su confianza me motiva día a día.

Cornejo: Corriendo desahogo la adrenalina que llevo dentro, que por cierto es mucha. Aprieto duro mis brazos y quiero llegar lo más pronto a la meta, claro como triunfadora. Es una forma de vida en la que me siento a gusto. El apoyo familiar siempre es el que me fortalece mucho al igual que el de mi entrenador Julio Chuqui; ellos me trasmiten buenas sensaciones y me dan confianza para levantarme y seguir adelante.

¿Cuáles son las metas para el 2015 y para el futuro?

Arévalo: En 2015 mi anhelo es el mundial, que también será en Cali, donde quiero estar entre los cinco primeros y en lo posible colarme en el podio. Tengo dos pruebas para ello: 2.000 metros obstáculos y 3.000 metros planos; pero debo elegir una, en la que más posibilidades tenga. Vamos a dar todo el próximo año y en el futuro sin duda quiero estar en un olimpiada. Ese es el camino trazado.

Cornejo: Este fue mi último año  dentro de la categoría prejuvenil. En 2015 apunto a llegar a un mundial juvenil y perfeccionar mis marcas en los 800 y 1.500 metros planos, porque quiero estar en una olimpiada y eso lo voy a conseguir cueste lo que cueste. Quiero codearme con las mejores atletas que existen en el mundo.

Fuente: Diario El Tiempo.