Megadeth dio concierto en Quito con problemas técnicos
El esperado regreso de la banda de ‘thrash metal’ Megadeth dejó con ‘un sabor agridulce’ a quienes acudieron al Ágora de la Casa de la Cultura de Quito para un show que pudo ser de los mejores del año pero que, por las fallas en el sonido y la parte técnica, sufrió penosos contratiempos.
Desde los teloneros de Basca ya se sintieron los problemas, el audio iba y venía y los instrumentos se escuchaban entrecortados.
Talvez todos pensaron que la falla se resolvería con la agrupación californiana, que abrió su show a las 21:30. Todo estaba listo, tres grandes pantallas LED donde se proyectarían imágenes relativas a cada una de las canciones programadas por el grupo, además de un gran escenario lleno de luces robóticas para armar el ambiente en cada tema.
Irrespeto a Megadeth
La banda, en el momento de ingresar, fue ovacionada por sus fanáticos, quienes se unieron al tema de apertura, ‘Hangar 18’. Imágenes de una supuesta autopsia a un extraterrestre en Roswell daban contexto a la canción salida del álbum de 1989, ‘Rust in peace’.
Luego sonaría ‘In my darkest hour’, canción que animó al público a no parar hasta el final pero los primeros problemas ya se evidenciaron apenas empezado el concierto.
Para el tema ‘Train of consequences’, salido de su clásico trabajo ‘Youthanasia’, las pantallas comenzaron a fallar hasta que, definitivamente, se apagaron y la banda se quedó sin ese ofrecimiento especial que tenían para los fanáticos y que los organizadores tanto anunciaron.
A las 21:50, los miembros de la agrupación salieron del escenario por un momento, hasta que arreglaran el problema, cuando volvieron Dave Mustaine, líder de la banda, se dirigió por primera vez al público y dijo que “tenían sorpresas para la noche”. Lamentablemente las sorpresas fueron los múltiples errores de sonido que vendrían y que no pararían hasta casi el final del show.
Entre idas y vueltas
Al regreso, Mustaine se discuilpó con el público y continuaron el show. Tristemente los líos también continuaron, los solos de guitarra de Chris Broderick no se escuchaban y a ratos el sonido solo salía por los parlantes del lado derecho.
En la canción ‘Trust’ al fin volvieron las imágenes, para esto ya habían pasado 30 minutos de concierto, el mismo que tuvo que parar otra vez a las 22:15. La molestia del público no se hizo esperar, una vorágine de improperios e insultos salían de las bocas de los disgustados fanáticos que, con razón, no paraban de quejarse.
Un técnico salió a dar disculpas y a informar que estaban “calibrando las pantallas”, no sirvió de nada, la gente aún seguía enfurecida.
Al fin, luego de aproximadamente 10 minutos de espera, regresó Mustaine y, con caballerosidad y tranquilidad, se disculpó otra vez: “gracias por su paciencia y por esperar, a esto le siguieron los temas ‘Reckoning day’ y ‘Youthanasia’, canciones salidas del álbum del mismo nombre y que eran el motivo de la gira.
A estas alturas de la velada, el sonido mejoró pero nunca del todo y las imágenes al fin volvieron; claro, otra cosa es cuando un concierto planeado se pone en escena con ‘todas las de la ley’.
‘A tout le monde’ y ‘Peace sells’ emocionaron a la audiencia, estas canciones fueron la antesala para su tema icónico, ‘Symphony of destruction’, que retumbó dentro del Ágora con la fuerza y el poder que la banda de ‘thrash metal’ tiene acostumbrados a sus seguidores.
Vic Rattlehead, personaje de la banda representado por un ‘ejecutivo calavérico’, salió y cruzó el escenario justo antes de ‘Symphony…’.
Al terminar, Mustaine, con un rostro muy emocionado y conmovido, agradeció repetidamente a su fervoroso y entregado público que nunca paró de corear las canciones, luego tomó una bandera de Ecuador y se la puso en hombros mientras hacía la eterna señal del rock con su mano.
La noche cerró con ‘Holly wars’, donde Dave presentó al resto de la banda y al final agradeció y prometió al público que volverían a Quito. Esperemos que la promesa se cumpla pero con otra organización. (CC)
Las causas de las fallas
° Según Vinicio Vélez, de Prosonido, el problema grave no estuvo en la ecualización del sonido sino en inconvenientes con el generador de corriente eléctrica que contrató la empresa organizadora del show y que no tenía la capacidad necesaria para el evento “por la subida y bajada de amperaje”.
Por este mismo motivo, explicó, “las pantallas también se apagaron” y durante la larga pausa de más de diez minutos tuvieron que cambiar y “resetear” con un generador más potente para solucionar el problema.
El Dato
Más de 100 policías se dispusieron para cubrir el concierto la noche del martes.
Fuente: Diario La Hora