Cuenca: Marcha indígena sigue pese a aprobación de ley
A las 13:45 de ayer, cuando la marcha de las organizaciones sociales e indígenas arribaba bajo la lluvia al Parque Calderón, por altavoces se comunicaba que la Ley de Recursos Hídricos, Usos y Aprovechamiento del Agua, que motivó la protesta, había sido aprobada en la Asamblea Nacional, en Quito.
Con 103 votos a favor, 21 en contra y seis abstenciones, la normativa quedó aprobada, lo que generó de inmediato las reacciones de los dirigentes y de gente que fue parte de la marcha que ayer llegó hasta Cuenca después de cuatro días de recorrido desde la provincia de Zamora Chinchipe.
La marcha por el agua, la vida y la libertad de los pueblos fue iniciativa de Salvador Quishpe, prefecto de Zamora Chinchipe, quien aseguró que se viven momentos comparables con el periodo de inicio de la Colonia, cuando los conquistadores españoles cambiaron por oro la salvación del inca Atahualpa, al que luego igual dieron muerte. “Lo mismo está pasando ahora, nos ofrecen mil maravillas y cuando nos damos cuenta han entregado nuestras riquezas a las empresas canadienses y chinas, contaminando además nuestras aguas; la historia se repite”, aseguró. Según Quishpe, la aprobación de la Ley de Aguas comprueba que los grupos sociales están excluidos del proyecto de revolución ciudadana, porque no fueron escuchados los pedidos de formar un organismo multiétnico y pluricultural.
Lauro Sigcha, dirigente de la Federación de Organizaciones Campesinas e Indígenas del Azuay, FOA, indicó que se esperaba la aprobación de la Ley, porque es conocido que el Gobierno mantiene una mayoría obediente en la Asamblea.
Sin embargo, dijo que seguirán en la lucha y aseguró que la caminata continuará como estaba planificada hasta llegar los primeros días de julio a la ciudad de Quito. También Fanny Campos, coordinadora nacional de Pachakutik, habló de una falsa revolución ciudadana, que no presta oído a los pedidos de los pueblos. Entre los participantes estuvieron pobladores del sector San Vicente de Girón, como María Eugenia Maita, Carmen Crespo y Zoila Zhinia, que dijeron que apoyan la protesta por convicción y no por pedido dirigencial. “El agua es el recurso más importante debemos defenderlo”, indicaron.
Ayer, la caravana tuvo inconvenientes que sortear antes de arribar a Cuenca. Los controles desde el sector de Tarqui, sobre todo en Zhucay, retrasaron la marcha. Patricio Zhingri, director de comunicación de la Ecuarunari, habló de un boicot sistemático para mermar la fuerza de la manifestación.
Alegó que en cada control efectuado por miembros de la Policía Nacional y agentes de Tránsito de la EMOV, se impide que las personas viajen en vehículos como camionetas, y debieron hacerlo a pie.
Los agentes de tránsito, indicaron que cumplen el reglamento vigente, porque viajar en vehículos que no están adecuados para transportar a varios pasajeros, como las camionetas, es una contravención que podría ser derivada en la multa del conductor y reducción de puntos en la licencia. Esto provocó que la manifestación arribe con más de una hora de retraso hasta el punto de concentración, la Catedral de la Inmaculada, donde debía efectuarse una misa a las 12:30. Mientras el presidente de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel, gestionaba una nueva eucaristía, se aprovechó la ocasión para hacer bailes tradicionales y gritar consignas, todo bajo la llovizna que dio un marco especial a la protesta.
Fuente: Diario El Tiempo