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EE.UU. indaga masacre en Orlando

Las autoridades de Estados Unidos continúan la investigación sobre los motivos de la peor matanza con armas de fuego en este país, en medio del rechazo mundial por la tragedia en la que perdieron la vida 49 personas que asistían a una “noche latina” en una discoteca gay en Orlando.

 El presidente Barack Obama llegó a declararse cada vez más “frustrado” con el Congreso estadounidense por la ausencia de medidas legislativas “de sentido común” para controlar la venta y posesión de armas de fuego.
El presunto autor de los hechos, Omar Seddique Mateen, nacido en Nueva York hace 29 años y muerto por disparos de la Policía, juró lealtad al grupo terrorista Estado Islámico, EI, en sus conversaciones telefónicas con los negociadores policiales durante las tres horas que permaneció dentro del club nocturno con una treintena de rehenes, según informó ayer la Policía.
Por segunda vez, el EI reivindicó, a través de su emisora de radio Al Bayan, la matanza, que calificó de “incursión de seguridad” en una “concentración de cruzados”, y señaló que Mateen era un “soldado del califato”.
El FBI reconoció ayer que había investigado durante 10 meses, entre 2013 y 2014, al homicida, por su posible vinculación con grupos terroristas y analiza ahora dos viajes que Mateen realizó a Arabia Saudí.
Obama aseguró que no existen pruebas claras para afirmar que la matanza estuviera “dirigida” por extremistas ni que formara parte de un plan terrorista de mayor escala. “Pensamos que es terrorismo e ignoramos el problema que tenemos con las armas”, explicó.
Las autoridades desconocen todavía qué llevó a Mateen, de origen afgano, a este centro de ocio nocturno de Orlando, situado a unos 200 kilómetros al norte de su casa, en Fort Pierce.
El padre del sospechoso, Mir Seddique Mateen, indicó al canal NBC News que su hijo se puso furioso hace dos meses cuando, durante una visita a Miami, vio a dos hombres besándose y tocándose en la calle.
El padre señaló en un comunicado que su hijo era un “muy buen chico”, con esposa y un niño, y que nunca se percató de que tuviera “rencor en su corazón”, informó BBC News.
 
 Propiedades
Las claves de la investigación pueden estar en los registros a sus propiedades, un apartamento en Fort Pierce y una casa en Port Saint Lucie -ambas en Florida-, a las que agentes del FBI entraron y de las que se llevaron documentación y un computador portátil.
El registro del apartamento acabó ayer después de varias horas en las que los oficiales buscaron pistas, especialmente en correos electrónicos y actividad en Internet, que les puedan llevar a conocer los motivos de la matanza. Los agentes tuvieron que esperar a que un robot de la unidad antiexplosivos comprobara que el sospechoso no hubiera dejado ninguna trampa.
El otro foco de atención es el propio local nocturno, donde agentes trabajan constantemente y de donde se han retirado ya numerosos cuerpos, que fueron trasladados a la Oficina Forense del Condado de Orange.
En el exterior de la discoteca Pulse su pudo ver ayer a una docena de agentes que, en línea y separados por menos de un metro, recorrieron un tramo de la calle Orange en busca de algún objeto que pueda darles alguna pista extra sobre este caso.
Fuentes de la Fiscalía indicaron que la investigación está en una fase inicial y que, aunque no hay evidencias de que haya más personas que supongan un riesgo público, están investigando a varias por su posible conexión con el caso.
Fuente: Diario El Tiempo